Innovación infantil: niños inventores en el campo de la salud y el bienestar

Los niños son naturalmente espontáneos, libres y desinhibidos, lo que les facilita dar rienda suelta a su imaginación y tener un gran potencial creativo. Lamentablemente, la progresiva interiorización de normas sociales y la socialización en contextos educativos rígidos actúan contra este talento innovador. La investigadora de la Universidad de California en Berkeley Alison Gopnik publicó en la revista Science resultados de sus estudios que demostraban cómo los pequeños adquieren conocimiento mediante procesos similares a la inducción característica de la ciencia: analizan patrones estadísticos, hacen experimentos y asimilan conocimientos mediante la observación de lo que hacen los demás. Saber que los niños aprenden a partir de la estadística y de las acciones de los demás del mismo modo que lo hacen los científicos facilita el marco necesario para que “a partir de ahora se utilice la curiosidad natural de los niños para diseñar nuevos métodos de enseñar y aprender la ciencia… Los bebés son como el departamento de I+D de la especie humana»

 http://www.sciencemag.org/content/337/6102/1623.abstract?sid=1b088887-21ee-4f08-964d-d24cb51f38d2

 

Contar con los niños se está haciendo común en estudios de investigación sobre innovación abierta y entre los sectores estratégicos de la innovación. Por ejemplo, el Grupo de Interfaces de Fluidos del Instituto Tecnológico de Massachusetts está trabajando en una “impresora de comida” que pone en práctica una de las ideas enviadas por una niña. Dave Stanton, un investigador cognitivo y becario de tecnología del Poynter Institute, asegura que, en determinados contextos, las limitaciones naturales de los niños se convierten en sus puntos fuertes. “Los niños son probadores de interfaces de usuario tremendos porque no han desarrollado el lenguaje necesario para interpretar instrucciones de texto; dependen de las indicaciones visuales”, explica Stanton. “Los niños pueden ayudarnos a equilibrar las interfaces intuitivas con los atributos específicos de los dominios que los diseñadores usan para dar personalidad… Me apasiona ver los elegantes modos de interacción humano-ordenador que podemos descubrir estudiando cómo aprovechan los niños estos mecanismos a la hora de resolver problemas.” describe Stanton

Reconociendo el potencial creativo e innovador de la infancia, el Museo de Ideas e Inventos de Barcelona convocó a más de 5000 niños con edades comprendidas entre los 5 y los 12 años para desarrollar todo tipo de inventos. Vean los resultados tan interesantes: “Imaginación al servicio del talento: los 10 mejores inventos de niños patentados en España en 2012”

http://vozpopuli.com/actualidad/19808-imaginacion-al-servicio-del-talento-los-10-mejores-inventos-de-ninos-patentados-en-espana-en-2012

Para abundar en esta línea, repasamos brevemente algunos inventos y descubrimientos realizados por niños y niñas que entran en el campo del saber de la salud y el bienestar de las personas:

– A los 14 años de edad, John Cohn diseñó el dispositivo Good Vibrations, pensado para personas con discapacidad auditiva. Este dispositivo permite convertir las ondas sonoras en sensaciones táctiles. Así las personas con problemas auditivos pueden literalmente sentir la música. En 2012 John se convirtió en el ganador de la Feria de Ciencias de Google.

– El estudiante estadounidense Jack Thomas Andraca inventó a los 15 años de edad una nueva técnica para diagnosticar el cáncer. Se trata de un tipo de pruebas para el diagnóstico de cáncer de páncreas, de ovario y de pulmón en las primeras etapas. Su método resultó ser mucho más rápido y más barato que sus análogos utilizados anteriormente. Los resultados de dichas pruebas pueden obtenerse en tan solo cinco minutos. Jack Andraca fue el ganador del primer premio de la Feria Internacional de Ciencia y Tecnología 2012 de Intel (Intel Science Fair) y fue reconocido con el premio Gordon E. Moore por su trabajo desarrollando un nuevo método de detección de cáncer pancreático.

http://es.wikipedia.org/wiki/Jack_Andraka

– Alanna Myers, estudiante de tercer grado en Safety Harbor Montessori Academia en Clearwater, Florida, de 8 años de edad, inventó un método de extracción indolora de vendajes que incluye jabón, aceite de lavanda y agua.

http://www.abcactionnews.com/dpp/news/region_north_pinellas/dunedin/safety-harbor-8-year-old-invents-pain-free-bandage-remover

– La estudiante de EE.UU. Mallory Kievmen inventó la piruleta contra el hipo a los 13 años de edad. Este dulce, bautizado como Hiccupops, contiene azúcar y vinagre de sidra de manzana. Mallory probó diferentes e inefectivos tratamientos, intentó con más de 100 remedios caseros hasta dar con una fórmula. La precoz inventora reveló que llegó al resultado combinando 3 de sus remedios favoritos: una paleta o lollipop, vinagre de sidra de manzana y azúcar. “Esos tres elementos accionan en la garganta una serie de nervios responsable del reflejo del hipo. Básicamente se sobre-estimulan esos nervios y se cancela el hipo”, explicó la adolescente. Como todo el mundo odia tener hipo, el invento ha sido un éxito y ahora la joven está a punto de lanzar su propia empresa para comercializar el producto.

http://informe21.com/salud-y-bienestar/12/05/17/nina-de-13-anos-inventa-la-cura-para-el-hipo

– En 1873, el estadounidense Chester Greenwood inventó la protección auditiva mediante orejeras a los 15 años de edad. Al niño le gustaba patinar y le pidió a su abuela que cosiera piezas de piel con un alambre para proteger las orejas del frío. Posteriormente, estos auriculares fueron modificados y se utilizarían para la protección contra el ruido. Según los informes, se le ocurrió la idea mientras hacía patinaje sobre hielo. Chester también patentó una caldera de té, un rastrillo de dientes de acero, una caja de cerillas de publicidad y una máquina que se utiliza en la producción de bobinas de madera para el alambre y el hilo. También inventó, aunque no patentó, un sostenedor del paraguas para los carteros. Además de ser un inventor, Greenwood era el dueño de un negocio de bicicletas y participó en la introducción de uno de los primeros sistemas de telefonía en Farmington. En 1977 el Estado de Maine declaró el 21 de diciembre el día de Chester Greenwood.

http://centrodeartigos.com/articulos-utiles/article_123093.html

– En 1824, Louis Braille, de 15 años de edad, inventó un sistema de escritura táctil que hace accesible la lectura a las personas ciegas y que actualmente se utiliza en todo el mundo, el llamado sistema Braille. La técnica se basa en la ‘letra nocturna’ del capitán de artillería Charles Barbier, que en aquella época era utilizada por los militares para leer informes en la oscuridad. A la edad de 3 años, Louis perdió la vista al infectarse el ojo izquierdo en un accidente en el taller de su padre, Simon-René Braille. La infección acabó por dañarle el ojo derecho también provocándole una ceguera irreversible. A la edad de diez años acudió a la Institución Real para Jóvenes Ciegos (Institution Royale des Jeunes Aveugles) en París donde aprendió a tocar el órgano y más tarde ejercería de profesor. En la escuela se enseñaba a leer a los jóvenes palpando letras en relieve, sin embargo ello les impedía escribir ya que para ello se empleaban letras moldeadas que se presionaban sobre el papel. A la edad de 12 años empezó a desarrollar el sistema Braille de lectura táctil empleando puntos en relieve tarea que finalizó tres años más tarde, en 1824. La inspiración de su sistema provino del capitán retirado Charles Barbier que le enseñó un sistema de escritura nocturna basado en doce puntos, que Braille redujo a seis, que permitía que los soldados se transmitieran las órdenes en silencio. Con posterioridad se extendió su sistema para incluir notación matemática (Nemeth Braille) y musical. Braille falleció en París debido a la tuberculosis el 6 de enero de 1852, recibiendo sepultura en el Panteón de París.

http://enciclopedia.us.es/index.php/Louis_Braille

Los niños, al tener menos constricciones propias del proceso de aculturación, formulan más preguntas, emplean de forma más libre la asociación de ideas, expresan más espontáneamente lo que piensan y sienten y lo hacen con distintos medios de expresión, porque no se preguntan si saben cantar o dibujar y cuando no tienen una respuesta satisfactoria ensayan respuestas alternativas. En definitiva, son más capaces de enfoques divergentes, “ilógicos”, que miran el mundo de un modo más ingenioso. Es un reto para las complejas sociedades contemporáneas ser capaces de aprovechar las creaciones y el flujo innovador que aportan los niños.